Además del misterio que alimenta la leyenda de su origen, se dice que en Egipto el tiempo duerme entre pirámides. Ellas son más antiguas que todo lo antiguo y hasta el tiempo les teme, según recuerda un proverbio árabe. Su fascinación parte de la fuerza energética que desprenden y que han servido para conseguir alturas estables y duraderas. Hay poco más de 200 de su tipo en el país y son el testimonio más relevante y poderoso del imperio antiguo. Ante ellas me sentí pequeña,

Pisar la tierra de Egipto ha sido a lo largo de los tiempos una llama inspiradora, porque sobre sus piedras y bajo sus aguas se siente el latido de una civilización asombrosa que se niega a ser olvidada. En las tallas de sus paredes dormita el pasado y en sus piedras, erosionadas por siglos de viento y arena, hay un legado con un peso simbólico enorme. Esa necesidad de los antiguos de comunicarse más allá del tiempo tiene en Egipto un sentido muy singular. Por eso llegar allí

A Holanda entré con una fuerte expectativa. Bañada por el río Amstel, es la ciudad de los canales y las bicicletas, donde están los...

Hay muchos detalles que te hacen sentir que estás en El Cairo, una metrópoli de 20 millones de personas acostumbrada a los pitos...

Todas las sensaciones que tuve en Egipto me recordaban que hay más de lo que el ojo es capaz de ver, que hay algo invisible que nos...

Con la misma pasión que admiré las pirámides, me enamoré del desierto. Era la primera vez que tenía contacto con esa enorme vastedad de...

El primero y más conectado de mis viajes, el del despertar de los sueños y las ilusiones, comienza en Egipto. Y comienza ahí, porque...